A finales del pasado mes de mayo se anunció la construcción del telescopio Square Kilometre Array en Sudáfrica y Australia. La competencia entre los dos emplazamientos finalistas ha sido enorme y los responsables del telescopio no han querido apostar por uno u otro.
El telescopio Square Kilometre Array estará formado por más de 3.000 antenas parabólicas interconectadas y otras tantas antenas convencionales que, a la vez, actuarán como una antena de un kilómetro cuadrado de superficie. Será el mayor radiotelescopio del mundo y 50 veces más sensible que los aparatos actuales. A través del telescopio los astrónomos quieren investigar los primeros momentos del universo, los tiempos en los que comenzaron a formarse las primeras estrellas y galaxias, 100 millones de años después del Bing Bang.
El telescopio supondrá una inversión de 1.500 millones de euros y comenzará a construirse en 2016 hasta 2024. Según los responsables, la distribución del telescopio en dos zonas encarecerá en un 10% la primera fase del proyecto y lo complicará técnicamente, pero han preferido hacerlo en un solo país.