Un grupo de alumnos de la Universidad de Purdue ha sustituido el combustible de la cortadora de hierba por agua. Parece ser que el uso del agua como combustible se restringe a vehículos con sistemas de alta presión. Es decir, en maquinaria pesada que se utiliza en la construcción, en la agricultura y en el bosque, y no en los coches.
El equipamiento del sistema hidráulico deberá ser de plástico, acero inoxidable o cerámica y para eliminar minerales e impurezas se utiliza agua destilada. Todo ello encarece el sistema más de lo previsto inicialmente.