La revolución de los últimos años en la ciencia de los materiales ha sido el grafeno, una capa monoatómica compuesta por sólo carbono. Es un gran conductor de semiconductor eléctrico y calor, ideal para la fabricación de nanoestructuras eléctricas. Ahora, los físicos de la Universidad de Manchester han desarrollado un nuevo material a partir del grafeno, mediante la adición de átomos de hidrógeno a la capa de carbono han creado el grafano. Al intercalar hidrógeno entre los carbonos, el material se convierte en aislante, por lo que la combinación de grafeno y grafano podría dar lugar a nanotransistores. Por otra parte, el grafano puede ser una fuente de hidrógeno al calentarse, ya que libera moléculas de hidrógeno.