Los hígados prefieren la nueva grasa

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Para el mecanismo sano de las grasas, se considera necesario el uso de nuevas grasas, ya sean alimenticias o producidas en el hígado. Según un estudio realizado por la Universidad de Washington (EEUU), las grasas ‘viejas’ acumuladas en el cuerpo no siguen el mismo metabolismo: no activan la producción de azúcar.

Para llevar a cabo la investigación se utilizaron ratones genéticamente modificados, cuyo hígado no producía grasa, por lo que la dieta era la única grasa nueva que contenía el cuerpo. Así, si se ingieren grasas en la dieta, no tenían problemas. Pero cuando pusieron una dieta sin grasa, el hígado empezó a utilizar grasas acumuladas en el cuerpo, pero los investigadores descubrieron sorprendidos que en el hígado se acumuló grasa y que tenían hipoglucemia en sangre. Parece ser que en estos ratones no se activó el mecanismo de regulación del nivel de azúcar en sangre.

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