Los grupos científicos formados por mujeres y hombres producen artículos más innovadores y de mayor impacto que los compuestos exclusivamente por hombres o mujeres. A esta conclusión ha llegado un grupo internacional (también medio y medio, formado por hombres y mujeres) desde el año 2000, analizando 6,6 millones de publicaciones científicas, todas ellas de carácter médico. El trabajo ha sido publicado en la revista PNAS.
Según el estudio, los beneficios de la actividad son mayores cuanto mayor sea el equilibrio del grupo, y parecen casi universales. Debe señalarse que han considerado la diversidad en términos de variables continuas, y que cuanto más cercana está la composición del grupo de 50/50, mejores resultados han obtenido en términos de innovación e impacto.
La novedad, por ejemplo, es que la aportación de los artículos de un año se ha medido en relación al conocimiento de años anteriores. Y han encontrado una correlación clara: el resultado del conjunto de grupos con equilibrio de género es más reciente que el de todos sus miembros. También para medir el impacto se han analizado los artículos con respecto a la literatura anterior y han demostrado que los artículos de los grupos mixtos obtienen más referencias.
Por otra parte, los autores señalan que existen diferencias significativas en la distribución de las subáreas de investigación médica. En este caso, se ha comprobado la existencia de diferencias en la relación del equilibrio y beneficios entre las distintas subáreas (se han considerado 24 subáreas). Y afirman que esta relación se da en todas las subáreas.
Por último, han investigado la causa de los beneficios del equilibrio, tratando de aclarar los factores que pueden influir en ello: la presencia de miembros de distinta experiencia, el tamaño y extensión de la red, los años de carrera y la internacionalización. Y han visto que los grupos con mayor equilibrio televisivo tienen una mayor diversidad en el resto de factores. Por tanto, los autores consideran que el equilibrio en el consumo establece una correlación significativa con los beneficios.
También hacen una observación: aunque en los últimos años los grupos mixtos son cada vez más numerosos, son menos de lo que cabría esperar al azar. La razón es que las mujeres reciben un pequeño reconocimiento por sus logros que los hombres. La investigación pone de manifiesto que esto, además de ser injusto, es contraproducente desde el punto de vista científico.