Los genes están por parejas, uno se recoge de la madre y el otro de su padre. A veces basta con que en uno de ellos haya un error para desarrollar una enfermedad. Ahora, sin afectar al gen normal, los investigadores han encontrado la forma de no expresar el gen defectuoso.
La investigación se ha llevado a cabo en la Universidad de Iowa en EE.UU. y se cree que algún día se podrá utilizar para tratar enfermedades como el cáncer, las enfermedades provocadas por los virus, la enfermedad de Huntington y otras enfermedades genéticas similares. Eso sí, primero deben encontrar el gen culpable de la enfermedad.
Para evitar la expresión de un gen defectuoso, los investigadores han utilizado una técnica basada en un ARN especial, el RNA interference. Con este pequeño ARN han conseguido bloquear el gen mutado sin que se produzca ningún cambio en el gen normal. Además, han visto que en un gen es capaz de detectar y de influir exclusivamente en el cambio de nucleótido único.