El cerebro crece de dentro a fuera por capas, primero formando capas internas y luego capas superiores siguiendo un orden determinado. Cada capa está compuesta por un tipo de neurona natural, pero todas se forman a partir de las neuronas internas. Para conseguirlo, las neuronas se dividen de forma asimétrica, es decir, cuando de una a dos se forman, éstas no son siempre iguales. Ahora, unos neurólogos de Nueva York han querido saber de qué depende que el cerebro produzca un tipo de neurona u otro.
El tiempo es la clave de la decisión de la neurona sobre cuándo se va a producir el nuevo tipo de neurona. De hecho, en los experimentos han descubierto que una neurona, cuanto más antigua es, menos capacidad tiene para construir nuevas neuronas en el interior del cerebro. Con el paso del tiempo, las neuronas exteriores se forman más fácilmente. Así controla el cuerpo que el cerebro tenga una estructura correcta, controlando el tiempo las neuronas.