La noticia de la física del pasado mes de septiembre fue sorprendente: se detectaron neutrinos que se mueven más rápido que la luz. La teoría de la relatividad especial de Einstein se basa precisamente en el principio contrario de que no se puede superar la velocidad de la luz, por lo que esta noticia cuestionaba la teoría de la relatividad especial. Por lo tanto, los científicos han buscado posibles errores en el experimento y sí han encontrado dos errores.
Muchos físicos dudaron en la noticia de septiembre. Los neutrinos se formaban en el laboratorio CERN, en Ginebra, y se detectaban en el laboratorio OPERA, en el centro de Italia. Este viaje de 730 kilómetros se realizaba 60 nanosegundos más rápido que la luz, según las mediciones de los físicos de OBRA.
Ambos errores estaban en el sistema GPS a la hora de medir tiempos y distancias de los dos extremos del viaje. Por un lado, había problemas de sincronía. La señal del GPS llega por satélite y el satélite se mueve rápidamente en órbita. Esta velocidad hace que el tiempo pase a distinta velocidad en el reloj del satélite y en el de la Tierra, como explica la teoría de la relatividad. Por ello, había que sincronizar el reloj del satélite con el reloj de la Tierra, y los cálculos de este proceso no estaban bien realizados. Por otra parte, los científicos de la OPERA han afirmado que existía una “conexión defectuosa” en un sistema que lleva la señal del GPS al reloj principal, en una conexión de la óptica.
La explicación no está completa. Se han detectado errores, pero falta comprobar en qué medida estos errores afectan a la medición. Los expertos afirman que ambos errores alteran el resultado final en sentido contrario. En cualquier caso, la medición debe considerarse errónea, no detectándose neutrinos más rápidos que la luz. Y los físicos de OPERA afirman que en el futuro harán nuevas mediciones, una vez subsanados estos errores y una vez recuperados los haces de neutrino.