Cuando una gota golpea una superficie salen salpicaduras, pequeñas gotitas. Pues este hecho es investigado en la Universidad de Chicago. Qué hay que investigar, ya que son muchas las características que influyen en este fenómeno, entre otras, la viscosidad del líquido, la presión y el peso atómico del gas del medio en el que cae la gota.
Los investigadores han comprobado que el resultado se debe principalmente a la acción del gas alrededor de la gota y que, por ejemplo, a medida que disminuye la presión se producen menos salpicaduras, y que hay una presión por debajo de la cual no sale salpicaduras. Esta presión depende del peso atómico del gas: a mayor peso atómico del gas, mayor es la presión necesaria para evitar salpicaduras.
Para estudiar las salpicaduras de las gotas, han dejado caer la gota desde distintas alturas en una cámara cerrada y han recogido con una cámara de alta velocidad el momento en que la gota choca con una lámina. En cada grabación se han seleccionado las variables que pueden influir en las salpicaduras. Se han utilizado tres líquidos, todos ellos alcoholes: metanol, etanol y 2-propanol.
También se ha modificado el gas de alrededor de la gota, se ha introducido en la cámara el helio, el cripton y el fluoruro de azufre, y a varias presiones, entre la presión ambiental y la presión cien veces menor.