Parece que no es recomendable comer zorro volador, ya que han visto que acumulan toxinas. Estos murciélagos se alimentan de las semillas de las palmeras de la familia Cycadae y captan las toxinas que se acumulan en ellas.
Chamorro, en la isla más grande de Micronesia, en Guam, tiende a desarrollar una grave enfermedad neurodegenerativa. Cuando comenzaron a investigar el origen de esta enfermedad, se sospechó que se debía a las semillas de Cycadae, que las utilizan para elaborar harina de bollería, pero al prepararlas para comer se dieron cuenta de que limpian con agua y eliminan toxinas. De esta forma se llegó a la conclusión de que la toxina podía llegar por otro camino.
El pueblo de Guam también se alimenta de murciélagos y, midiendo la cantidad de toxinas de estos murciélagos, han visto que es cientos de veces mayor que la de la harina de bollería. Por ello, han concluido que la enfermedad de Chamorro se debe a las toxinas acumuladas en los murciélagos.