Los científicos encargados de la reproducción humana están preocupados en los últimos veinte años. La fecundidad de la especie humana no ha disminuido, pero la calidad del esperma ha disminuido en los últimos cincuenta años. El número de espermatozoides se está reduciendo constantemente, pero los expertos franceses han añadido otro elemento al problema: la evolución y la calidad del esperma es distinta en cada territorio. En las muestras recogidas en el centro de Rennes se han detectado 87 millones de espermatozoides por milímetro de esperma y en las recogidas en el centro de Tolosa tan sólo 72 millones. Los científicos no han explicado el porqué de estas diferencias.
Por otro lado, según un estudio publicado por el Inserm, entre 1974 y 1994 el número de espermatozoides en la zona de París ha disminuido, pero en Tolosa, por ejemplo, no se ha producido un descenso. En Estados Unidos también se constata la existencia de diferencias territoriales, pero la concentración de espermatozoides ha aumentado considerablemente entre 1970 y 1994.