Para paliar los efectos del Alzheimer es imprescindible detectar la enfermedad lo antes posible. Conviene diagnosticarlos antes de que aparezcan los primeros síntomas y ahora parece que una técnica de resonancia magnética desarrollada en el ratón puede ser la adecuada para conseguirlo.
En la actualidad, el diagnóstico médico se realiza tras la explicación de la confusión y los problemas de memoria. Sin embargo, 10 o 20 años antes de la aparición de estos síntomas, las placas de proteínas causantes de la enfermedad ya han empezado a formarse en el cerebro. Desgraciadamente, en los seres vivos no era posible ver estas placas desde el principio.
En Japón, sin embargo, han dado un paso importante. Los investigadores se han basado en la técnica normal de resonancia magnética y han utilizado un compuesto pegado a las placas para hacer visibles las placas. De hecho, en las imágenes que proporciona las técnicas convencionales, las placas no sobresalen de otras estructuras del cerebro. Con este compuesto las placas se separan fácilmente. El compuesto es un derivado del flúor que no está presente en el cuerpo humano ni en los ratones. Según estudios realizados con el ratón, basta con inyectar el compuesto para amarrarlo a las placas.
Gracias a ello han conseguido destacar las placas. Esto permitirá detectar y tratar el Alzheimer mucho antes de que aparezcan los primeros síntomas.