El Sol está muy lejos del centro de la Vía Láctea. Esto ha permitido desarrollar la vida en la Tierra, ya que el sistema solar no recibe muchas radiaciones cósmicas. Sin embargo, según un estudio del instituto científico Space Telescope de Baltimore. El Sol nació más cerca del centro de la galaxia, en un lugar en el que la vida parece imposible y luego se desplazó hacia el exterior. Esta evolución se refleja en la composición química del Sol, con más hierro que otras estrellas de su misma edad.
El equipo astrónomo internacional ha estudiado la posibilidad de la migración mediante una simulación por ordenador. El cálculo ha sido de cien mil horas en un superordenador para simular la distancia entre el nacimiento del Sol y su estado actual. El resultado coincide con la hipótesis de migración. Y si la hipótesis es buena para explicar la evolución del Sol, sirve también para otras estrellas, lo que influye en las investigaciones sobre la formación de galaxias.