El sistema CAPTCHA de los formularios de Internet también será utilizado para la digitalización de libros. Originalmente fue concebida para luchar contra el spam automático basado en caracteres distorsionados. El sistema solicita al usuario la descodificación de una secuencia distorsionada de caracteres en cada formulario. Los informáticos de la Universidad Carnegie Mellon de Estados Unidos han propuesto ampliar el sistema para ayudar a digitalizar libros antiguos. El nuevo sistema ReCAPTCHA, además de la tradicional sucesión distorsionada, requerirá al usuario la descodificación de una palabra distorsionada que se desea digitalizar.