Si bien hasta ahora la tendencia ha sido controlar y reducir la extensión de la enfermedad, se han conocido nuevos casos de difteria en los territorios de Rusia y la Unión Soviética y se ha encendido la luz roja. Este año se han dado a conocer los datos del comportamiento de la difteria en los dos últimos años.
Es indudable que la extensión de la difteria se ha incrementado. El año pasado se detectaron 47.802 nuevos casos en los países de la antigua Unión Soviética y 1.746 murieron afectados por la diftería. Según los investigadores, el hecho de que haya habido grandes movimientos de población podría explicar la situación actual. Sin embargo, no se han dado a conocer medidas para combatir la epidemia.
Los datos han sido recogidos en el Centro de Investigación de Enfermedades Transmisibles de EE.UU. y confirman que la enfermedad se está extendiendo incontroladamente. Si no se toman medidas a corto plazo, la difteria llegará a los territorios colindantes. Bulgaria, Finlandia, Alemania, Polonia y Noruega han sido consideradas zonas de riesgo.