A partir del año que viene, los fabricantes de aparatos eléctricos estarán obligados a retirar y reciclar los aparatos devueltos por los compradores. Además, a partir de 2006 no podrán utilizar plomo.
De hecho, la basura electrónica está creciendo tres veces más que la basura doméstica, por lo que el problema es cada vez más grave. Los fabricantes deben dar solución al problema y una de las vías que proponen los expertos es el uso de componentes de aparatos antiguos en los nuevos productos.