A pesar de que los buscadores han contribuido a aumentar el acceso a la información de la World Wide Web, no han podido responder al enorme desarrollo que ha tenido Internet.
El crecimiento ha provocado que los buscadores hayan perdido efectividad desde 1997 y que tan sólo indexen el 16% de las páginas que actualmente son públicas. De este modo indexan las páginas con más enlaces orientados a ellas, es decir, aquellas que han conseguido una mayor atracción; en definitiva, EEUU (Estados Unidos) y comerciales, en detrimento de los no estadounidenses y/o educativos.