La concentración de clorofluorocarbonos denominados con letras CFC ha disminuido considerablemente en los últimos tiempos, según algunas mediciones realizadas por la National Oceanic and Atmospheric Administration en Estados Unidos. Los valores medidos se muestran en los siguientes diagramas. Las líneas continuas indican las predicciones realizadas por los científicos y los valores de las mediciones realizadas por las líneas rotas. Los expertos se sorprenden porque no esperaban un descenso tan grande.
Esto significa que la capa de ozono se completa rápidamente, ya que todavía hay CFCs suficientes para ser dañados durante años arriba. A principios del siglo siguiente se podrá comprobar la hipótesis de que el adelgazamiento de la capa detectada sobre los polos es debido a elementos denominados CFC. Es posible que los agujeros de ozono (en realidad no hay agujeros, sino una capa más fina) se hayan producido por motivos ajenos a la actividad industrial de la Tierra.
El ozono se renueva constantemente a ciertas temperaturas por efecto de los rayos ultravioleta, pero cuando la temperatura es demasiado baja, como en los polos, el proceso de renovación del ozono se ralentiza o se detiene.