El cambio climático calienta el agua de los océanos, lo que también afecta a los peces. Investigadores ingleses han analizado entre 1977 y 2001 las 36 especies de peces más comunes en las profundidades del mar del Norte. Durante este periodo, la temperatura del agua aumentó 1 ºC, por lo que dos tercios de la población de peces han migrado a aguas más frías, más profundas, más al norte o ambas a la vez.