Un equipo dirigido por investigadores del Instituto Max Planck de Radioastronomía ha descubierto una molécula de aspecto similar a un aminoácido, el amino acetonitrilo. Se ha identificado en el centro de la Vía Láctea en una nube muy compacta de polvo y gas a 25.000 años luz (LMH).
La detección de moléculas orgánicas en el espacio no es excepcional. Los astrónomos no sólo encuentran gas y polvo, sino también sustancias orgánicas básicas. Para ello, analizan la luz que emiten los átomos y las moléculas. Cada uno emite a frecuencias muy específicas y los astrónomos analizan esta luz para saber qué compuestos hay.
El descubrimiento de moléculas como el amino acetonitrilo es un descubrimiento importante, ya que no es fácil de producir a temperaturas extremas que suelen estar en el espacio. Si es demasiado caliente se deshacen y si es demasiado frío no se pueden formar.