Han visto la influencia del alcohol en la liberación de endorfinas y en el sistema de recompensas cerebrales in vivo
Aunque es fácil ver que el alcohol actúa sobre el cerebro, no es tan fácil conocer las circunstancias de la exposición. Ahora, un equipo de investigadores de la Universidad McGill de Canadá ha demostrado que el alcohol actúa sobre una de las partes más primitivas del cerebro. Además, han confirmado que el consumo moderado de alcohol aumenta la liberación de endorfinas.
Los investigadores ya sabían que el alcohol influía en base a investigaciones realizadas en los tubos de ensayo. Sin embargo, las conclusiones obtenidas de este tipo de pruebas son indirectas y los investigadores tenían grandes limitaciones para su interpretación.
Para superar la barrera se ha utilizado la microdiálisis, ya que se puede utilizar con animales vivos. A través de ella se ha estudiado la influencia del alcohol en la zona VTA del cerebro central, donde se liberan endorfinas y otros opioideos. Así, han demostrado que pequeñas y moderadas dosis de alcohol, y no grandes, provocan la liberación de endorfinas en la zona VTA.
Según los investigadores, el campo VTA es "clave" en la influencia del alcohol en el sistema de recompensas cerebrales. De hecho, a través del sistema de premios se refuerza el impulso al consumo de alcohol y se da un impulso similar a otras sustancias adictivas. Por lo tanto, consideran que esta investigación puede servir para buscar vías concretas para tratar la adicción al alcohol, ya que esta zona cerebral es muy similar en las personas y en las ratas.