Nace con la intención de convertirse en el mayor avión comercial de Airbus, el A380, para superar el Boeing 747, el más grande de todos los tiempos. Antes de salir a la venta está pasando pruebas. Estas pruebas determinarán, entre otras cosas, la distancia entre un avión y el A380 en los aterrizajes del aeropuerto.
Lo cierto es que el A380 genera una turbulencia bastante fuerte. En la práctica, en lo que respecta al tráfico en un aeropuerto, para que esta turbulencia no afecte al avión que viene detrás, hay que dejar entre ambos una gran distancia de tiempo y espacio.
En este sentido, la ventaja de la competencia es: Otro avión aterrizará o despegará un minuto antes del A380 tras un boeing 747. De momento esa es la decisión de la ICAO, la Organización Internacional de Aviación Civil. En contra de esta decisión, Airbus está realizando otras pruebas que demuestran que las turbulencias no tienen tanta influencia.