Reciclado de residuos de polímero por pirólisis
La Escuela de Ingenieros de Bilbao está llevando a cabo el estudio de viabilidad de la pirólisis en el reciclado de materiales poliméricos. Cuando hablamos de materiales poliméricos, hablamos tanto de productos tan complejos como los composites y ruedas de fibra o resina de vidrio, como de productos convencionales como el plástico de las basuras domésticas. Todos estos materiales se componen principalmente del polímero, compuesto orgánico macromolecular obtenido a partir de los derivados del petróleo. En la actualidad es necesario encontrar vías para su reciclaje: por un lado, porque la legislación es cada vez más exigente en materia de vertederos y, por otro, porque hablamos de la reutilización de materiales derivados del petróleo, un recurso limitado.
La pirólisis es un nuevo método de reciclaje en investigación. Técnicamente se llama reciclado químico y no tiene nada que ver con el reciclado convencional o mecánico convencional en el que se funde el material y se vuelve a dar forma.
La pirólisis consiste en calentar el material en un entorno libre de oxígeno a temperaturas superiores a 400 ºC. Al no existir oxígeno, no hay combustión del material, en contra de lo que ocurre en la incineración. En la pirólisis, la materia orgánica macromolecular de materiales poliméricos se separa en moléculas más pequeñas (líquidos y gases). Los gases -hidrógeno, metano, etano, propano, etc.- se utilizan como combustibles y son fuente de energía suficiente para alimentar el propio proceso. En cuanto a los líquidos, se trata de mezclas complejas de compuestos orgánicos, como el petróleo o ciertas fracciones del alquitrán de hulla, por lo que pueden emplearse directamente como combustible como el fuel, o ser tratadas en refinería y obtener productos químicos valiosos como la gasolina o el gasóleo.
Por otro lado, existen residuos sólidos de materiales poliméricos que no sufren ningún tipo de alteración durante la pirólisis. Estos componentes pueden ser materiales inorgánicos como los hilos metálicos de las ruedas o los refuerzos de fibra de vidrio, o componentes orgánicos no volátiles como el negro de carbono que se utiliza para mejorar enormemente las propiedades mecánicas de las ruedas y que les dan color negro. Muchos de estos componentes son de gran valor y al no variar teóricamente la pirólisis, pueden ser reutilizados en aplicaciones originales.
Por todo ello, la pirólisis es una opción muy interesante para el reciclaje de materiales poliméricos. Por un lado aprovecha todos los componentes del material. Por otro lado, contamina menos que la incineración. Por último, se puede utilizar para todo tipo de residuos, sobre todo cuando no es posible utilizar reciclado convencional, como plásticos mezclados y difíciles de separar (en el caso de basuras) u otros componentes, refuerzos de fibra, componentes metálicos, etc., en materiales que los contengan (ruedas de coches, plásticos utilizados en el sector eléctrico, etc.). ).
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