"Comienza la salud de todo el cuerpo en la boca"

Galarraga Aiestaran, Ana

Elhuyar Zientzia

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Irene Lafuente Ibañez de Mendoza investiga en odontología, aunque dice ser un “médico frustrado”. Quería estudiar medicina. Pero, por la nota y por otras cuestiones, no consiguió entrar en el grado de medicina y empezó a estudiar odontología, que era su segunda oportunidad. Y no se arrepiente: "En segundo, me gustó una asignatura y en cuarto volví a coger. El profesor de esa asignatura me dio la oportunidad de estudiar, y desde entonces estoy aquí”.

Dice claramente que gracias a él está en el campo de la investigación, y afirma firmemente que ha acertado al coger ese camino: "Tenía muy claro que no me veía en la clínica. Lo veía en la universidad, en la investigación, y con su ayuda se me han ido abriendo las puertas y he ido recorriendo el camino”.

No todo ha sido fácil y entre sus dificultades destaca la escasez de ayudas económicas para investigar en odontología. "Las becas y ayudas a la investigación van de la misma manera que en otras áreas, donde no hay muchos antecedentes, por lo que las ayudas llegan muy poco". Para él, mucha gente no sabe que la salud de todo el cuerpo empieza en la boca: "Cada vez está más claro qué relación tiene la higiene y la salud bucal con la del cuerpo entero".

Lafuente investiga en el cáncer de boca, concretamente en la prevención del cáncer de boca. Explica que hay más casos de cáncer entre las mujeres y que están intentando aclarar las razones. "Antes era más frecuente en los hombres que en las mujeres. El alcohol y el tabaco son factores de riesgo del cáncer y los hombres bebían y fumaban más. En el Oria el consumo está igualado. Y si miramos a la gente que fuma y no bebe, la prevalencia de cáncer de boca es mayor en las mujeres. Nuestra hipótesis es que se debe a factores genéticos”.

No cabía, los pájaros son importantes

Este trabajo lo cumple plenamente, puesto que beneficia a toda la sociedad. Además, es muy motivador que a través de la investigación, aunque llegue a conocer algo, siempre quedará mucho más por conocer e investigar.

Estas razones le parecen útiles para animar a los jóvenes a investigar. Porque “hace falta gente. No sólo los recursos. También hacen falta recursos, pero sobre todo gente. Como dice un profesor, los pájaros son más importantes que las cabías”. Sin embargo, reconoce que el mundo de la investigación es difícil, porque no hay suficientes subvenciones al menos en su ámbito.

Se ve como investigador de cara al futuro. "Cuando hice el grado, aposté por quedarme aquí. Hice el máster, he hecho el doctorado y quiero seguir todos los pasos que he dado para llegar hasta aquí. El camino es seguir en la universidad y seguir investigando. En definitiva, si quieres estudiar odontología en España, tiene que estar en la universidad".

Además, reconoce que le gusta mucho el trabajo de profesor: "Imparto clases en grupo en euskera y son muy pocas. Esto ofrece muchas posibilidades para trabajar las relaciones cercanas”. Casi todos los alumnos son mujeres. De hecho, en su área son mayoría y nunca ha sentido discriminación por ser mujer. Por otra parte, no excluye la inclusión de algún alumno suyo en el mundo de la investigación. “Puede que alguien quiera coger ese camino, sí”.

Irene Lafuente Ibáñez de Mendoza
Irene Lafuente Ibáñez de Mendoza nació en Bilbao, en ella. Tras la realización del Grado en Odontología en la UPV/EHU, realizó el Máster en Patología Oral, obteniendo el doctorado en 2022 con la tesis “Análisis genético, citológico y micológico en pacientes diagnosticados de Periimplantitis en la Comunidad Autónoma del País Vasco”. Actualmente es investigador y profesor en Patología Bucal y Medicina de la UPV.
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