Un paso más para curar la cirrosis

Un grupo de científicos estadounidenses y británicos han conseguido identificar y bloquear la proteína que provoca la cirrosis hepática. Por lo tanto, se ha dado un paso importante en la consecución de un tratamiento adecuado contra la cirrosis. Como es sabido, enfermedades crónicas como la hepatitis o el abuso de alcohol provocan cicatrices en el hígado.

Para curarlas, el cuerpo fabrica tejidos de fibras. Pero a veces los tejidos de fibras crecen demasiado y entonces se produce una cirrosis porque las cicatrices se deforman o dificultan la función normal del hígado. Los científicos de la investigación han descubierto que el crecimiento excesivo de tejido fibroso se debe a la proteína C/EBP. Sin conformarse con el conocimiento, los científicos han realizado una transformación genética de la proteína, lo que ha permitido bloquear el papel de la proteína. Todo ello con el ratón.

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