Hasta ahora todas las teorías afirman que los sonidos que se producen bajo el agua no pueden transmitirse al aire. Sin embargo, han publicado una teoría que revoca esta idea. Según esta teoría, la fuente sonora emite dos tipos de ondas, algunas capaces de atravesar la superficie del agua para extenderla al aire y otras, que se reflejan en la superficie. Las ondas que salen al aire son de baja frecuencia. Estas ondas pierden fuerza con relativa facilidad hacia la superficie, por lo que sólo es posible que el sonido llegue al aire si el emisor del sonido está cerca de la superficie.