Sangría en el segundo ojo del huracán
Las predicciones de los huracanes han mejorado mucho en los últimos años y la mayoría de las veces inventan el recorrido que va a realizar el huracán, aunque sea aproximadamente. Pero predecir la fuerza del huracán es otra cosa: depende de la pared que rodea el ojo del huracán, que se debe observar con mucha resolución para hacer el anuncio. Y hasta ahora no utilizan este tipo de herramientas.
Pues ahora han dado un pequeño paso adelante con el proyecto RAINEX de la Fundación de la Ciencia de Estados Unidos. Tres aviones han sido utilizados para observar el ojo y la pared del huracán con aparatos de gran resolución. Concretamente, en 2005 se observaron tres huracanes: Rita, Katrina y Ofelia. Y vieron que las fluctuaciones de la fuerza del huracán se producen cuando un ojo desaparece y surge otro.
Cuando el ojo está muriendo es posible que empiece a crearse un segundo ojo, y si entre ambos se localiza una zona de viento seco, llamada agujero, ese agujero puede coincidir con el segundo ojo. Entonces el ojo se expande y el huracán pierde fuerza, luego se contrae y el huracán se refuerza.
Zu idazle
Zientzia aldizkaria
