En un centro de investigación holandés se ha desarrollado un sistema para reducir la contaminación acústica del tren. La colocación de barreras de 60 cm junto al ferrocarril es suficiente para reducir 6-8 decibelios el ruido del tren.
Las barreras deberán estar fabricadas con material absorbente del ruido, es decir, con plástico o madera. El ruido del tren es una de las quejas más comunes que la mayoría de las compañías ferroviarias reciben del público.