El tren de alta velocidad francés, el prestigioso TGV, colocó en enero su nueva marca de velocidad. La marca no la ha puesto el TGV de la línea Lyon-París, sino el TGV atlántico que aún no está en servicio. Concretamente, en la vía de alta velocidad que llegará hasta Hendaia correrá el TGV Atlántico.
En sesiones en línea entre París y Lyon, el TGV Atlántico ha alcanzado una velocidad de 410 km/h. Esto no es su velocidad habitual. No superará la velocidad de 300 km/h al inicio del servicio.