Al teléfono móvil se le ha acusado de ciertos tipos de cáncer, pero a partir de ahora también le han denunciado que eleva la presión arterial porque acelera el sistema simpático.
En la ciudad alemana de Friburg, en la clínica neurológica universitaria, el equipo del doctor Braune ha analizado esta influencia. Han probado con siete hombres y tres mujeres de 26 a 36 años. Durante treinta y cinco minutos han estado cinco veces al día con el teléfono móvil tipo GSM y el tipo placebo que no emitía ondas electromagnéticas. Los resultados indican que sólo el tipo GSM afecta a la presión arterial.