El CERN o laboratorio europeo de física de partículas ha publicado los resultados de los experimentos de choque realizados en los últimos cinco años con iones pesados. Los resultados obtenidos con estos experimentos indican que es posible tener plasma quark-gluón, aunque por el momento no se ha podido observar directamente el plasma.
Los físicos han conseguido mayores energías que nunca en la colisión de iones pesados. Los valores experimentales de temperatura y densidad han estado muy cerca de los valores teóricos necesarios para la formación del plasma quark-gloui, y los resultados obtenidos han mostrado signos de plasma, aunque no se ha detectado directamente. Para ello se necesitan choques de mayor energía.
Según los expertos del CERN, el acelerador RHIC (acelerador relativista para el choque de iones pesados) que el Departamento de Energía de los EEUU está construyendo en Brokhaven, puede obtener energía crítica de choque. Este acelerador, que entrará en funcionamiento este año, deberá esperar hasta ese momento para poder detectar directamente el plasma quark-gluón.