Un grupo de científicos internacionales ha encontrado una tendencia mundial preocupante en cuanto a polinización. Se han recopilado y analizado los datos de los experimentos que se han realizado en los últimos años sobre el tema y han concluido que en paisajes muy adaptados por el hombre la disponibilidad de polen está bastante limitada.
Nature Communications advierte de que los cambios provocados por el hombre en el uso de la tierra suponen el mayor peligro tanto para plantas silvestres como para insectos polinizadores, además de prever que la situación empeorará.
El apercibimiento se ha basado en 2.247 experimentos realizados en todo el mundo, teniendo en cuenta la información de 1.247 especies vegetales. Destacan que también han recibido informes que no están escritos en inglés.
En estos experimentos se ha tratado de cuantificar el efecto de la polinización: algunas plantas han recibido una polinización natural por insectos y, a su lado, las plantas de la misma especie han recibido una polinización artificial hecha a mano por el hombre. A continuación se han medido las semillas de estas plantas, mientras que la polinización asistida ha aumentado la reproducción en un 63%.
Dicen que las plantas silvestres con polinizantes muy especializados son las que presentan mayor riesgo. Así, se ha observado que en zonas donde la agricultura está extendida puede producirse una proliferación de abeja común (Apis mellifera), lo que a su vez puede suponer una disminución de otros polinizadores silvestres en detrimento de las plantas que se apoyan en estos insectos. En un escrito fuera del artículo científico, Joanne M. Bennett ha considerado la situación como un "bono de tiempo".