Un equipo de investigadores del Imperial College de Londres ha afirmado que el oxígeno es imprescindible para los seres vivos, pero que puede ser mortal para el feto en desarrollo.
Los investigadores han medido el nivel de oxígeno en las plazas durante los tres primeros meses de embarazo. En las placentas de 30 mujeres se ha instalado un pequeño monitor que detectó que entre la 8ª y la 15ª semana de embarazo el nivel de oxígeno de la sangre que había pasado por el cordón umbilical aumentaba considerablemente.
Según los investigadores, estos resultados confirman la existencia de dos fases en el embarazo. En el primer trimestre hay una baja concentración de oxígeno en las plazas, ya que el feto lo necesita para poder desarrollarlo. A continuación, el nivel de oxígeno aumenta rápidamente. Según los investigadores, este cambio brusco podría ser una de las causas de abortos involuntarios.
Por otro lado, los investigadores de Londres intentan encontrar vías para hacer frente al riesgo. Una vía de protección del feto podría ser la administración de vitaminas antioxidantes, que destruyen los radicales libres creados por el oxígeno. Sin embargo, por el momento no hay pruebas que lo confirmen.