El cerebro de los músicos no es igual al de los no músicos. El plano temporal asociado al oído es más desarrollado en el hemisferio izquierdo que en el derecho.
Por otro lado, el cuerpo calloso que asegura la comunicación entre los dos hemisferios, tiene entre un 10 y un 15% más desarrollado por los músicos. Esta última característica permitirá a los instrumentistas una mejor coordinación psicomotriz mejorando la comunicación entre los dos hemisferios.
Según los investigadores, estas características no tienen mucho que ver con la genética. Sin embargo, con las sesiones de formación de los músicos, y las que han empezado a aprender música antes de los siete años, dicen que tienen estas características más marcadas.