Detectados los geoneutrinos, los físicos japoneses han concluido que la radiactividad se debe a la mitad del calor que tiene la Tierra. La otra mitad es el resto del calor que tenía cuando se formó la Tierra.
Para llegar a esta conclusión, físicos de la Universidad de Tohoku (Japón) han medido neutrinos utilizando el detector de neutrinos KamLAND. Más de la mitad de los neutrinos detectados por los físicos provienen de reactores y residuos nucleares. Otros procedían de los rayos cósmicos, mientras que la parte final procedía de la radiactividad natural de la tierra, es decir, de la liberación de elementos radiactivos.
Los físicos han calculado que el calor liberado por la radiactividad natural es aproximadamente el 54% del que se encuentra en la superficie terrestre. El resultado coincide con los cálculos realizados por otros métodos, por lo que la investigación ha sido importante para confirmar los cálculos anteriores y los actuales.
Además, se ha indicado el origen del resto del calor: es el resto del calor que, unido gas, polvo y otros materiales, tenía en el momento de la formación de la Tierra. Teniendo en cuenta que la Tierra pierde cien grados por mil millones de años y que la tasa de desintegración del material radiactivo es conocida, la Tierra tardará todavía miles de millones de años en enfriarse.