Si es carnívoro, mejor pequeño

(Foto: J. R. Aihartza).

Si eres carnívoro, ser grande no es tan bueno. Según un estudio realizado con fósiles norteamericanos, los cánidos tendían a crecer. Esto les obligó a recurrir a presas de mayor tamaño y a extinguirlas antes.

La base de investigación ha sido otro estudio de 1999. Entonces, estudiaron las especies carnívoras actuales y concluyeron que la dieta de las especies carnívoras de más de 21,5 kilos es diferente a la de las más pequeñas. De hecho, en lugar de comer cualquier cosa que sea inferior a su peso, cazan presas más grandes que ellas. Es decir, son hipercarnívoros.

Ahora, Blaire Van Valkenburgh ha investigado los fósiles de los cánidos de América del Norte para comprobar si ocurría en el pasado y analizar las consecuencias a largo plazo. Y sí, en el pasado también era así. Además, ha llegado a la conclusión de que los hipercarnívoros se extinguieron en 5 millones de años o menos, mientras que los carnívoros menores y omnívoros duraron 12 millones de años.

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