Este verano, en un invernadero de Hawai, se plantará la primera planta de café que produce granos sin cafeína. Si todo va bien, estos ejemplares no deberán ser descafeinados químicamente, como se ha hecho hasta ahora.
El investigador de la Universidad de Manoa, John Stiles, ha podido desarrollar esta planta en el laboratorio, pero ahora tendrá que hacer la prueba en el invernadero y, según ha reconocido, está deseando degustar el nuevo café.
Tras identificar el gen que gobierna la producción de la cafeína, las investigaciones han eliminado y anulado su trabajo. Para ello se ha utilizado una bacteria que, gracias a la bacteria Agrobacterium tumefaciens, en los tejidos embrionarios ya se anula la función del gen, por lo que luego ocurre lo mismo en toda la planta.
De esta forma, esta planta produce sólo el 3% de la cafeína convencional, es decir, el 3% es descafeinado. Hay cafés salvajes sin cafeína, pero esta vez sólo se ha eliminado a una especie comercial, el Coffea Arabica. Pero no hay que olvidar que el 60% del café que se consume es de este tipo.
La investigadora ha afirmado que al eliminar químicamente la cafeína del café convencional, ésta pierde otras características además de la cafeína, por lo que prefiere los ejemplares descafeinados de la nueva planta tras su transformación genética.