En Australia han inventado un traje especial que puede ayudar a bomberos, mineros, soldados y otros trabajadores a soportar temperaturas elevadas durante más tiempo. Los que se utilizan en la actualidad son herméticos y por ello evitan la expulsión de calor a través del sudor. Estas nuevas prendas están equipadas con refrigeración.
Primero absorben el calor corporal mediante unos orificios llenos de vapor. Posteriormente, mediante un intercambiador de calor especial, se procede a la evacuación a la atmósfera del calor captado. Con este sistema se puede permanecer más tiempo que con los trajes herméticos antes de que se quede sin fuerza con el calor del calor.