Dos grandes áreas del Océano Pacífico, una equivalente a la costa occidental de los Estados Unidos, y la otra, entre Hawai y Alaska, entran en la ruta migratoria de grandes depredadores marinos, desde los atunes hasta los ballenas. A esta conclusión han llegado algunos científicos de Census of Marine Life al comparar las rutas migratorias de numerosos depredadores. Los resultados han sido publicados en la revista Nature.
Para el seguimiento de sus rutas durante las migraciones, los investigadores utilizaron 4.306 dispositivos electrónicos entre 2000 y 2009. Así se conocieron 1.791 individuos de 23 especies diferentes. Posteriormente, la investigadora Barbara Block de la Universidad de Stanford (autora principal del artículo), señaló en la web de Nature que habían hecho algo que hasta entonces nadie había hecho: se juntaron todas las vías de migración y se analizaron si comparten espacios.
Block ha afirmado que los dos "puntos calientes" encontrados son ricos en alimentos y, sobre todo, en la producción primaria. "Son como las praderas de sabana en el mar", afirma.