Arqueólogos europeos colaboran para proteger y gestionar los barcos hundidos. El objetivo es transmitir al público los secretos de estos hundimientos. Estas investigaciones se centrarán en 4 barcos hundidos en el Norte de Europa.
Analizando estos envases, los científicos quieren saber por qué se mantiene un envase y por qué se deshace el otro. Los datos recogidos contribuirán a prever el destino de los barcos hundidos, lo que permite a los arqueólogos decidir de forma más directa cómo protegerlos. Con este objetivo, se pretende crear museos virtuales submarinos que eviten que barcos hundidos sean recordados por la gente.