Los científicos creen que los aguafuertes descubiertos en algunas de las cuevas de Cussac del suroeste de Francia son uno de los más antiguos que se han encontrado. Hay más de 200 dibujos que cubren más de medio kilómetro en total. A pesar de que se encontraron en el año 2000, hasta la fecha no se había informado de ello.
Según los expertos, pueden superar los 30.000 años. Si esto es así, serían las segundas más antiguas. Los grabados más antiguos que se han encontrado tienen 32.000 años y se encuentran en la cueva de Chauvet-Pont-d’Arc, en la región francesa de Ardèche.
En los grabados encontrados en Cussac se pueden ver aves, mamuts y personas. Las imágenes están bien cuidadas y son muy especiales. Las personas están representadas de forma esquemática, de manera que para representar el cuerpo de la mujer, por ejemplo, sólo pintaron el triángulo del pubis.