Uno de los zumos obtenidos en el fruto del árbol del pan, llamado jacobín, ha inhibido in vitro el virus HIV (SIDA) en un ensayo realizado en el Instituto de Microbiología e Inmunología de Montpellier. Jean Favero ha sido el científico que se ha dado cuenta de este poder del sabio.
Aunque no afecta a los linfocitos contaminados, los protege mientras están sanos. Para evitar que esta molécula sea tan tóxica, los investigadores se preparan para experimentar in vivo.
Por otro lado, en Iparraguirre, en el Hospital General de Boston se está buscando otro medicamento. Se trata de tres productos asociados: TR, DDI (ambos utilizados a la vez) y la tercera sustancia, que puede ser piridinonea o nebirapinea. Todas estas moléculas atacan una enzima que necesita el virus para reproducirse, la transcriptasa invertida.
Los primeros ensayos in vitro indican que la mezcla de estas tres sustancias puede proteger las células y curar las células contaminadas. Ahora falta aplicar este “cocktail” al ser humano, pero lo van a hacer antes.