La Sociedad Médica Canadiense (CMA) ha pedido disculpas a los pueblos indígenas por los daños físicos y psicológicos que históricamente les han afectado por la práctica médica o la ausencia de la misma. En el mismo acto que ha hecho la petición de perdón ha presentado un informe que recoge las actividades antiéticas de los médicos, entre las que se encuentran las esterilizaciones y los tratamientos experimentales, algunos de ellos con niños.
La CMA reconoce que en la actualidad existe una discriminación y que las personas de origen indígena tienen un mayor riesgo de recibir un servicio sanitario deficiente debido a las emisiones. Prueba de ello es que tienen una esperanza de vida más corta que el resto de la población, y más diabetes, hipertensión y enfermedad mental.
Además del reconocimiento de los daños causados y la petición de perdón, la CMA también ha concretado los pasos para la reconciliación, como dar más oportunidades a las personas de los pueblos indígenas para trabajar en medicina.