Los desplazamientos de Feromón son imprescindibles para los sits o ratones para coordinar comportamientos grupales. Tanto como comunicaciones telefónicas para el ser humano.
Las feromonas son moléculas producidas por animales. Se distribuyen por la atmósfera y son recogidos por otro animal de la misma especie, a menudo a muchos kilómetros de distancia, causando en este receptor respuestas fisiológicas y/o comportamentales. Estas moléculas pequeñas, al igual que los compuestos aromáticos, se consideran asociadas a los receptores específicos de proteínas de neuronas sensoriales presentes en la fosa nasal. En cualquier caso, las neuronas receptoras de feromona (presentes en el órgano llamado "bomeronasal") no envían directamente la información al córtex, a diferencia de las neuronas receptoras de olores, situadas en el órgano olfativo. En consecuencia, se ponen en marcha inconscientemente comportamientos básicos como el interés sexual. En otras palabras, ni siquiera olemos que ocurre realmente. Todo esto si eres ratón.
Hasta el momento, en lo que se refiere a la actividad de las feromonas humanas, sólo se conocían las que sincronizaban la ovulación (desde hace tiempo es conocida la presencia y presencia de esta feromona en las habitaciones de las mujeres). Los receptores bomeronasales, como el V1r, que se aislaron primero fueron los roedores. Se ha identificado el primer "candidato" que ahora puede ser receptor de la feromona humana, denominado V1RL1 (basado en "V1r-like gene"). Se han identificado otras siete semejantes a la V1r en el ser humano, pero han visto que no son funcionales (pseudógenos), por lo que son signos de un mayor uso de feromonas por nuestros antepasados. Lo que en el ser humano es equivalente al órgano bomeronasal sólo aparece en una parte de la embriogénesis y parece que también es una huella no funcional de nuestro origen.
Las feromonas, como los conejos y los cerdos, son recogidas por el hombre a través del órgano olfativo. En cualquier caso, el descubrimiento de este potencial receptor puede ser uno de los pasos para explicar la causa molecular de nuestros comportamientos básicos.