Las personas infectadas por el VIH sufren envejecimiento prematuro y patologías asociadas. Ahora, en la revista Journal of Microbiology, Inmunology and Infection, han presentado un indicador relacionado con este proceso. Además, afirman que la causa del envejecimiento es la propia infección.
En el estudio se midió el nivel de moléculas de microARN en la sangre de las personas con VIH. Estas moléculas modulan la expresión de los genes y vieron que el nivel de una de ellas era mucho más alto de lo normal. La miR-21-5p es una molécula relacionada con la inflamación y el estrés oxidante que a su vez son causa del envejecimiento prematuro.
Para confirmar la hipótesis, se analizaron personas que, a pesar de haber sido infectadas por el VIH, no desarrollan el sida (se llaman élites). Estas personas tienen una mutación protectora, pero ellos también habían aumentado su miR-21-5p y, aunque la infección estaba controlada, tenían inflamación crónica. Así descubren que el envejecimiento depende de la infección, independientemente de que adquiera o no antirretrovirales.
Según los investigadores, los resultados son útiles para el seguimiento del estado de salud de los pacientes.