Investigadores británicos han descubierto que la resistencia a los medicamentos de algunas cepas del VIH (Virus de la Inmunodeficiencia Humana) es definitiva. Se han analizado 550 casos en los que el tratamiento con drogas de Birmingham ha fallado y en todos ellos se han medido niveles muy elevados de virus resistente al VIH en sangre. El VIH consigue la resistencia gracias a las mutaciones y aunque la cepa desaparece al abandonar el tratamiento, al empezar a tomar el mismo medicamento vuelve a aparecer más rápido y en mayor cantidad que el anterior. El virus resistente parece quedar en los nodos linfáticos. El descubrimiento ha culminado en gran medida con la esperanza de reciclar tratamientos de drogas.