Hace 160 millones de años, grandes grupos de esponjas o esponjas cubrían buena parte de la Europa actual, según el científico australiano Joe Ghiold.
Los investigadores llevan tiempo estudiando los fósiles de estos primitivos animales alimentados con esponjas o materia orgánica. Pero cada uno ha realizado sus estudios por separado y las piezas de este gran puzzle paleontológico han estado repartidas por todo el mundo. No pensaban que estas esponjas formaban un arrecife de 2.900 kilómetros.
El Sr. Ghiold inició sus investigaciones en Polonia en 1980 y entre 1986 y 1988 trabajó un equipo de científicos con diferentes disciplinas. El objetivo era seguir las huellas del arrecife y fijar sus límites. Hoy en día saben que este arrecife de esponjas se extendía desde el sur de la Península Ibérica hasta Rumanía por Francia, Suiza y Alemania.
El arrecife comenzó a formarse en el Jurásico, hace 150-170 millones de años. En aguas templadas someras se desarrollaron esponjas de diferentes especies.
Al final del Jurásico, las esponjas murieron bajando el nivel de las aguas. Los restos de las esponjas quedaron allí y comenzó a desarrollar el coral.