Un grupo de investigadores franceses e italianos ha desarrollado una forma de detectar animales acuáticos sin atropellar ni ver al mismo animal. El método es útil para detectar especies invasoras en humedales. La clave para ello es la detección del ADN, ya que los animales acuáticos liberan células en el agua.
En cierta medida, identificar el ADN de la célula recogida del agua es como estudiar el ADN de los fósiles, ya que tienen que trabajar con cantidades muy pequeñas. Por ello, ha participado un experto en el estudio del ADN de los fósiles. Lo más difícil es extraer, amplificar e identificar el ADN --como en los fosiles-, por lo que para ello han tenido que adaptar las técnicas de paleogenética. Concretamente, han buscado el ADN de las mitocondrias en las células, más abundante que el del núcleo. La diferencia con el estudio de los fósiles es que el ADN de la especie a identificar puede ser conocido.
En este caso, esta conocida especie era la rana de toros (Rana catesbeiana), una rana invasora norteamericana que ha entrado en varios países europeos. Entre otras cosas, ha entrado en Francia, en determinados lugares, lo que les ha permitido afirmar que el método es fiable.