Cualquier persona que ha estudiado una física relativamente profunda conoce las cuatro fuerzas que gobiernan el comportamiento del Universo: la gravedad, el electromagnetismo, la fuerza nuclear violenta (de los núcleos atómicos) y la fuerza nuclear débil (en algunos tipos de radiactividad). Y además sabe que estos cuatro y estos cuatro están solos.
Pero el pasado mes de enero un grupo de científicos (Epharaim Fischbach y S.H. Aronson, entre otros, anuncian el descubrimiento de la quinta fuerza fundamental que afecta a todos los cuerpos.
Para poder entender esta quinta fuerza misteriosa tenemos que ir a la antigüedad; a Galileo Galilei. En 1589, cuando Galileo tenía 25 años, fue nombrado profesor de matemáticas de la Universidad de Pisa. Una vez allí, lanzó desde la torre de Pisa objetos de diferente peso y realizó conocidos ensayos. Los objetos tocaban al mismo tiempo el suelo. Este popular programa convenció a todo el mundo de que todos los objetos caen a la misma velocidad.
El nuevo descubrimiento pone en debate este principio de la física, que todos hemos aprobado a lo largo de los siglos, incluyendo Newton y Einstein. Esta nueva fuerza bautizada como hipercarga es contragrabitatoria y bastante débil. Además, no comienza a trabajar mientras dos objetos no se encuentran a distancias inferiores a 200 m. La fuerza repele los protones y neutrones de ambos objetos. Su robustez depende de la densidad del objeto, por lo que afecta más al hierro que al hidrógeno. Por ejemplo, si una bola de hierro de la misma masa y otra de madera caen al mismo tiempo en el vacío, la de madera tocaría el suelo antes porque al tener menor densidad le afectaría menos la hipercarga.
Es pronto para comprobar si esta quinta fuerza es real o no. A partir de ahora habrá noticias sin labios sobre este problema.