A la persona que tiene vértigos de posición paroxísticos le parece que ella o los objetos que le rodean están girando o oscilando. Esta enfermedad vestibular normalmente no es una enfermedad grave, pero a veces deja que la persona no sea capaz de trabajar.
Según estudios recientes, la enfermedad puede curarse en un 90%. Para ello se toman deliberadamente posturas que provocan una crisis de vértigo. Al principio la crisis suele ser frecuente, pero luego los puertos se van suavizando y terminan desapareciendo.